Según cifras del año 2020 de la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN), en el país hay casi 800 mil armas de fuego inscritas de manera legal, aunque se desconoce la cantidad de armas ilegales que hay en el territorio nacional.
Ante el incremento reconocido de actos ilícitos en los que se ven involucradas armas, autoridades policiales han incrementado las labores de control y revisión de los casos en la comuna.
El comisario de la Tercera Comisaría de Carabineros de Ovalle, Mayor Osvaldo González Gutiérrez, explicó a El Ovallino que esa dependencia ha dispuesto de distintos cursos de acción para poder controlar y detectar oportunamente el uso, porte y tenencia de armas de fuego.
“Se están realizando servicios policiales extraordinarios de fiscalización de armas domiciliarias a través de personal de las unidades territoriales, igualmente, tendientes a detectar posibles ilícitos, faltas o infracciones a la ley de parte de personas con armas legalmente inscritas. Esto, con la finalidad de disminuir los diferentes delitos de intimidación con armas, y como una forma de hacer frente a dicha problemática delictual”, explicó González.
Señaló que el plan busca garantizar la seguridad de las personas, dando respuesta a la actual contingencia, y según lo expuesto en la mesa legislativa “Menos Armas, Más Seguridad”, con la que se desarrollan acciones concretas para fortalecer la prevención.
“El propósito es aumentar el control y la fiscalización de las armas inscritas activas a nivel nacional, recuperar armas de fuego, disminuir ilícitos, establecer faltas e infracciones a la Ley de Control de Armas y elementos similares N° 17.798, efectuando controles efectivos en terreno, ejerciendo procesos administrativos y sancionatorios en contra de usuarios infractores, principalmente por incumplimiento de las normas”, especificó el uniformado.
Infracciones
Reiteró el comisario que algunas de las infracciones más comunes relacionadas con la tenencia de las armas registradas es que el usuario mantenga el arma en un domicilio distinto al declarado, es decir que no haya efectuado el cambio de domicilio; que no exhiba el arma inscrita al momento de ser fiscalizado; y que no pueda dar cumplimiento al proceso de acreditación de condiciones físicas y psíquicas, el cual debe cumplirse cada cinco años después de la inscripción de un arma de fuego.
Este último requisito involucra a todas aquellas personas que inscribieron armas de fuego desde mayo de 2005 en adelante, fecha en la cual se modificó la ley y se dispuso la acreditación. Las multas por este tipo de infracciones van de 2 a 10 UTM, mientras que la reincidencia eleva al doble la penalidad y el usuario arriesga la cancelación de inscripción de su arma de fuego.
Destacó González que si el propietario de un arma legalmente inscrita fallece, se debe regularizar la tenencia de ésta dentro de los 90 días después de su fallecimiento.
“El trámite lo puede realizar el poseedor o tenedor, el heredero o la persona que tenga la custodia de ésta, quien deberá informar a la Autoridad Fiscalizadora el hecho del fallecimiento y la individualización del heredero que, bajo su responsabilidad, tendrá la posesión provisoria de dicha arma, a la persona que cometa la siguiente infracción”, señala la respectiva ley.
“El presente servicio de fiscalización, busca que la ciudadanía en general tome conciencia de la señalada problemática e insta hacer entrega de forma voluntaria de las armas de fuego y munición que por uno u otro motivo las mantienen en su poder, pudiendo ser armas legalmente inscritas o de otra procedencia, haciendo hincapié que dicha acción de entrega armas, se puede realizar de forma anónima y no habrá ningún tipo acción legal en su contra”, enfatizó el uniformado.
