• Nuevos cuestionamientos en torno al fallecido Padre Damián Heredia han surgido por estos días en Pucón.
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Juan Carlos Morales (50) y Eladio Pereda (52) relataron a un medio puconino los crudos episodios que vivieron con el clérigo que años más tarde, fue trasladado finalmente a la capital de Limarí.

Continúan saliendo a la luz nuevos antecedentes que dan cuenta de presuntos abusos sexuales cometidos por el que en vida fuera un conocido y querido sacerdote de la ciudad de Ovalle.

Se trata del Padre Damián Heredia, quien gozó de tal gran aceptación y respaldo por parte de la comunidad local en la década del ochenta, que incluso se bautizó con su nombre a importantes obras de la comuna (calle, escuela y plazoleta).

El medio sureño “La voz de Pucón” ha realizado diversas investigaciones en torno al tema, ya que recordemos que el clérigo se desempeñó en ese zona del país durante la primera mitad de la década de los 80’.

 Ahora ese diario electrónico ha revelado nuevos antecedentes respecto a la conducta y acciones cometidas por el religioso en esa época, y que antecedieron su arribo a la comuna de Ovalle para desempeñarse como párroco del Santísimo Redentor (1986-1992).

“Es una cosa personal, íntima que nos afectó para el resto de nuestros días”

El primer testimonio publicado corresponde a Juan Carlos Morales (50),  quien aseguró a los 12 años fue convencido para vivir en la casa parroquial, a un costado del principal templo católico puconino.

“Eran otras épocas. Otros tiempos. Aquí era una pobreza tremenda en Pucón. Yo fui a parar ahí por un tema económico. Yo era un menor de edad y trabajaba en el Hotel Pucón. Yo tenía 12 años. Y llegó un pasajero de España acá y a él le causó admiración que un niño de esa edad trabajara en aseo. Ese señor se llamaba Luis González y me deja una beca a mí, para que yo estudie y no me dedique tanto a trabajar, porque él tenía una especie de ONG. Cuando se va, me dice que tengo que ir todos los meses a la oficina de la parroquia para que me entreguen el dinero”, dijo al medio puconino.

Juan Carlos explicó que el primer mes le cancelaron el dinero (algo de $1200 de la época con un sueldo mínimo que estaba cercano a los $4500). “Pero cuando voy a buscarlo al segundo mes me dicen ‘no, el padre dice que tienes que venir a vivir aquí o sino no hay más beca’. Entonces yo me fui a vivir ahí”, contó.

La publicación señala, “pero además había una condición para que él se traslade a la casa del sacerdote. Debía pagar la estadía con trabajo. Así, al menos le dijeron los allegados al religioso Damián Heredia: “Me dicen que tengo que trabajar para la iglesia. Ayudar a picar leña, el invernadero. Lo que fuera”. Dice que esa es la razón por la que se trasladó ahí. Y que la plata del español nunca más la vio. Estuvo dos años en la casa”.

Juan Carlos Morales relató la historia a “La Voz de Pucón”, desde el punto de vista del grupo de seis jóvenes que vivieron en la misma casa parroquial durante seis años. “La  mayoría de ellos fue víctima de alguna forma u otra de abusos sexuales de parte del sacerdote. Estos iban de tocaciones, besos y proposiciones directas de sexo. Sobre el por qué no se fueron a las primeras insinuaciones, Morales cuenta que las razones eran muchas. Desde las necesidades materiales, hasta la vulnerabilidad de cada uno de ellos en diferentes áreas”.

“Es un poco hablar de uno, de tu integridad. Por ese mismo motivo es que habemos muchas personas que nunca hablamos hasta el día de hoy. Es muy difícil hablar con alguien y decirle una cosa así. Es una cosa personal, íntima que nos afectó para el resto de nuestros días”, reveló Morales al medio sureño.

“Empezó a desnudarse y hacer tocaciones. Entonces yo me arranqué de ahí. Yo tenía como 15 años”

Otro de los testimonios recogidos en la investigación publicada esta semana, fue el de Eladio Pereda (52).

 “Estuve como tres años en el internado. Pero por una pelea que tuve me expulsaron de ese internado. Y como no tenía donde irme y yo tocaba en la guitarra en el coro, le comenté esto al padre Damián y él me dijo ‘ningún problema, te vienes a vivir conmigo’ a la casa parroquial. Fue más o menos en la misma época de Juan Carlos”, sostuvo.

Pereda explicó que se fue a vivir al internado católico que estaba en la Escuela Fátima a pocos metros de la casa del sacerdote y como no tenía cómo pagar lo hacía con trabajos de aseo en la parroquia y también en la vivienda que ocupaba Damián Heredia: “Ahí cuando nos castigaba, el cura nos dejaba sin comer”.

El hombre que en esa época tenía 15 años, confidenció que el clérigo quiso mantener relaciones sexuales con él.  “Un día me dijo que no me estaba portando muy bien y me tenía que confesar. Me dijo que tenía que ir a su pieza a una hora determinada. Fue más o menos a las nueve de la noche. Estaban todos acostados y me llevó a la pieza. Me dijo ‘hoy día nos vamos a acostar juntos’. Entonces yo le digo ‘cómo padre vamos a hacer eso si yo tengo mi pieza’. Y me dice que me quede tranquilo, que no va a pasar nada. Empezó a desnudarse y hacer tocaciones. Entonces yo me arranqué de ahí. Yo tenía como 15 años. Él quería que tuviésemos relaciones. Él fue al baño y yo me arranqué”. Contó que luego de eso, vivió una semana terrible y el sacerdote lo dejaba sin comer. “Me martirizó porque no quise estar con él y tuve que irme”.

Fiscalía de Pucón investigará abusos de Padre Damián Heredia

Esta semana se escribió también un importante capítulo en torno a los presuntos abusos del que fuera un  querido sacerdote en Ovalle.  El Ministerio Público decidió investigar los abusos sexuales denunciados por, al menos, dos víctimas en contra del sacerdote Damián Heredia Carrasco. 

Así lo confirmó  al medio la “Voz de Pucón”, el fiscal especial designado para estos casos, Ítalo Ortega, quien explicó que decidió incluir las denuncias en contra del sacerdote, luego de los testimonios publicados hace unos días por el medio digital puconino .“Se ha tomado conocimiento de los antecedentes publicados en el mérito de lo cual vamos a decretar diligencias a objeto de ubicar a quienes aparecen como víctimas en la publicación para recabar sus testimonios y a través de determinar los siguientes cursos de acción”, explicó Ortega a dicho diario electrónico.

Testimonios exclusivos recogidos por El Ovallino en el mes de junio

Precisamente a raíz de ese polémico artículo publicado el 5 de junio por el mismo medio sureño, El Ovallino había ido en busca de testimonios locales en torno a la figura del fallecido religioso.

Una de las fuentes consultadas señaló que tras su arribo algunas personas sospechaban de conductas poco apropiadas por parte del religioso.

 Además se dijo que un año o dos después de su arribo, se habría realizado una acusación formal escrita, la que fue enviada al Arzobispado de La Serena. La supuesta misiva contaba que Heredia había sido sorprendido intimando con  un joven mayor de edad al interior de la parroquia en Ovalle. Tras enterarse de esa acusación a sus espaldas, se menciona que el religioso habría hecho sentir su malestar abiertamente contra quienes lo delataron.

 La situación habría sido comunicada a la institución ya que “había preocupación por los niños y por la parroquia por el ejemplo que se estaba dando”, dijo una fuente a El Ovallino durante ese mes de junio.

 Esa supuesta relación mantenida por el sacerdote era en ese entonces una especie de secreto a voces, “pero nunca hubo una comprobación jurídica ni denuncia”, sostuvo otro relato anónimo.

Otra de las fuentes lo tildó derechamente como un “cerdo”, ”prepotente” y hasta “abusador” que  además de cometer vejaciones contra niños y adolescentes, utilizaba sus supuestas habilidades “sanadoras” para poder validarse con la comunidad.

Al ser consultado sobre los homenajes que nuestra comuna ha dedicado en su honor  y memoria (una escuela, una calle, una plazoleta y una población), una fuente comentó que “es una pena para Ovalle, sobre todo porque era sacerdote”.

Interrogante sobre obras bautizadas con su nombre en la comuna

Tras conocerse los primeros antecedentes que salieron a la luz durante el pasado mes de junio, había surgido la interrogante; ¿se debería eliminar su nombre de importantes obras ovallinas?

Consultado por este tema, el alcalde de Ovalle, Claudio Rentería, había señalado a nuestro medio, "estaré atento al desarrollo de este caso para tomar las medidas que sean necesarias”.

Por esos días el concejal Carlos Ramos, no había descartado esa medida e incluso había planteado esa inquietud ante el Concejo Municipal.

“No voy a avalar con ningún homenaje a una persona que esté condenada por pedofilia, denuncias de tipo sexual, de abusos de menores. En lo personal - no como vocero de la municipalidad - voy a plantear la situación nuevamente en el Concejo Municipal que, si esto llega a una investigación final en la cual hay un veredicto y se comprueba fehacientemente que esto ocurrió, voy a exigir que se eliminen los nombre de este sacerdote tanto de la población, como también de la plaza y la escuela. Esa es mi postura personal”, dijo tras enterarse de estas dos nuevas acusaciones y la investigación que realizará la Fiscalía en el sur.

 

 

 

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Diario El Ovallino