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No solo la sequía ha afectado a los agricultores de la provincia, sino también otros factores, como el alza en el precio de los insumos, la variación del dólar, la decisión de la banca de no financiar proyectos agrícolas y pecuarios, entre otros. En este contexto, los alcaldes solicitan mayor apoyo de las autoridades gubernamentales, para que este tradicional rubro no desaparezca en la zona.

Omar Aguirre / Provincia del Limarí

 

A través de un comunicado de prensa, el alcalde de Monte Patria manifestó su preocupación por el escenario que enfrentará el sector de la agricultura tras un invierno con escasas lluvias y la constante sequía. A su opinión, se sumaron otros alcaldes de la provincia que sostienen existen un “dejo” por parte de las autoridades en esta área.

El escenario en la comuna de Monte Patria es complejo, así como en otros territorios rurales de la provincia, tras las consecuencias económicas de la pandemia por el covid19, la extensa sequía de la zona y la mediana inversión estatal para los sectores del agro. En base a esto, los alcaldes de Limarí concuerdan en que se deben determinar los cursos de acción a considerar.

Si bien, los datos en materias de desempleo en la región no son negativos, según reportes del Instituto Nacional de Estadísticas, para el trimestre móvil de abril, mayo y junio, desde el año 2022 al 2023 no hay variación en la desocupación laboral (7.1), esto en la provincial del Limarí. Sin embargo, la situación podría tornarse compleja en los próximos meses, cuando se reflejen los resultados del actual escenario de las medianas y grandes agrícolas.

El alcalde Cristian Herrera Peña plantea un dejo por parte de las autoridades, en cuanto a una proyección en materias productivas y económicas a largo plazo. “A nivel local, el escenario de la sequía exige mayor planificación en cuanto a la gestión del recurso hídrico, allí surgen medidas como las plantas desaladoras, una nueva normativa de aguas que se sobreponga a la lógica de acciones y considere la capacidad de las cuencas hídricas, entre otras sugerencias”.

El alcalde agrega que “estamos en una situación muy compleja, que no sólo se refiere al tema hídrico, sino más bien con múltiples factores; se ha sumado a la sequía, el bajo retorno de las exportaciones, el costo de los insumos por las pandemias, la variación del dólar, la decisión de la banca de no financiar proyectos agrícolas y pecuarios. Nosotros proyectamos un gran desempleo en los sectores rurales para los próximos años, creo que nadie le está tomando el peso a lo que estamos viviendo, nosotros creemos que es necesaria una intervención del estado, por ejemplo, que se hagan mediciones concretas sobre la disponibilidad hídrica, para así limitar las superficies de siembra y los tipos de cultivo, necesitamos un gran plan regulador del agro”.

La temática hídrica pareciera ser el centro de la discusión en materias productivas, con este mismo centro es que los valles del Limarí se caracterizan por la existencia de embalses de contención para el recurso.

A pesar de esto, el alcalde Cristian Herrera plantea utilizar otras opciones, a fin de mantener un marco productivo y laboral sostenible, “es importante avanzar con una planta desaladora en la provincia, sabemos que es caro llegar hasta los sectores altos de la comuna, pero si llega a Ovalle, liberar el agua que tenemos que dejar pasar desde nuestros valles, para cumplir los derechos de agua de los regantes bajos de la provincia; si nosotros pudiéramos suplir esa necesidad con agua desalada, podríamos redistribuir mejor el recursos hídrico en la zona alta; también es fundamental apoyar a los pequeños productores, liberarlos de las deudas de INDAP y aportar en sus contextos, principalmente las heladas, también tenemos a los crianceros con falta de alimentos. Pareciera que a nadie le importa, a nivel regional y nacional hemos estado levantando la voz, solicitado audiencia con el ministro de agricultura y no sabemos cuál es el pensamiento, pareciera que se busca dejar morir la agricultura. Esperemos que esto no se trate de una falta de voluntad, porque nosotros y nuestros productores nos encontramos en una situación compleja, donde no vemos mayor futuro en el rubro que ha mantenido por años los valles generosos”.

Consultada por diario El Ovallino respecto a esta problemática, la alcaldesa de Rio Hurtado, Carmen Juana Olivares, señaló que “por supuesto comparto la opinión con el alcalde de Monte Patria, creo que es una visión de todos los alcaldes del Limarí y el Ministerio de Agricultura no se ha pronunciado. Estamos atravesando una crisis hídrica que no ha dado tregua, seguimos sin lluvias y ahora estamos sin el apoyo económico que se entregaba a través del forraje, de las cajas familiares, estanques y mangueras que llegaban a los sectores secanos. El ministerio no se ha hecho presente con un programa específico para las familias campesinas, tanto agricultores, como crianceros y apicultores que son los que se ven más afectados”.

Por su parte, Pedro Castillo, alcalde de Combarbalá, también manifestó compartir la opinión de los otros ediles; “veo que estamos en septiembre, esperábamos las lluvias que no llegaron y tenemos que empezar a tomar medidas para apoyar a nuestros agricultores. Si no hay más lluvias, todas las autoridades y el Gobierno tienen que coordinarse para que podamos enfrentar los meses que se vienen, para que la producción agrícola se mantenga, para que la agricultura familiar campesina pueda seguir desarrollándose en nuestra comuna de Combarbalá, y también para que, todas las actividades que requieren el apoyo del Estado, puedan seguir efectuándose sin ningún inconveniente”.

 

RESPUESTA DESDE SEREMI DE AGRICULTURA

 

El Seremi de Agricultura, Christian Álvarez, explicó que “como Gobierno y ministerio de agricultura estamos avanzando en diversas alternativas para mitigar los efectos del cambio climático y la semana recién pasada sesionó el Comité Regional de Emergencia Agrícola, el que busca implementar varias medidas. Entre estas podemos mencionar, en primer lugar, solicitar al Gobierno la disponibilidad de recursos extraordinarios para medidas de mitigación de emergencia. Además, estamos coordinando acciones con el MOP, para administrar durante la primavera 2022 y verano 2023, a través de la DOH y DGA, de tal forma de conciliar la disponibilidad de agua para consumo y la necesidad de agua para la subsistencia de la agricultura".

La autoridad de agricultura agregó que “entre las gestiones que se están realizando, debemos poder acelerar las inversiones de las soluciones estructurales al déficit hídrico en la región, como lo son las plantas desalinizadoras de agua del mar y de plantas de reciclado de aguas grises para la agricultura. No podemos dejar de mencionar un trabajo muy importante que se está desarrollando, que tiene que ver con las labores en las quebradas del secano contenidas en el Programa de Manejo de Suelo de la Tierra que permite contener y almacenar aguas lluvia. Un programa que se desarrolla en Combarbalá y que hoy se considera un prototipo en una política pública Regional".

El titular de la cartera agregó que “otro de los acuerdos abordados en el comité, es definir una restricción en la inversión con recursos del estado de las especies agrícolas más demandantes de agua de riego con recursos públicos. Otro punto que es muy importante destacar, es promover los beneficios de la ley 18.450, la cual fue promulgada y aceptada su prórroga, ya que facilita el acceso de la pequeña agricultura familiar campesina para realizar inversiones de riego a través de la CNR y los concursos vigentes. Finalmente, como gobierno buscamos potenciar la construcción de tranques comunitarios que implique el manejo del agua de riego para un grupo de agricultores, entre 5.000 a 20.000 m3. Durante el último tiempo, nos hemos reunido con regantes, agricultores y gran parte de los actores del sector silvoagropecuario, quienes nos han pedido desarrollar las acciones planteadas con anterioridad y es en eso que nos hemos enfocado. Aquí es muy importante trabajar de manera articulada y mancomunada, con representantes del sector público y privado, con el objetivo de lograr una adaptación a los nuevos parámetros que nos presenta el cambio climático. También, es muy importante destacar el proyecto FNDR que está en desarrollo, que corresponde al Programa Sanitario Productivo para el ganado de Crianceros de Coquimbo, el cual por el SAG y ha permitido desparasitar un total de 26 mil cabezas de ganado caprino, siendo que en un inicio estaba dirigido a sólo 12 mil".

 

 

 

 

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