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El Ovallino
Luego de siete meses de labores comunitarias, la tarde de este viernes los vecinos de El Higueral reinauguraron su plaza, que fue restaurada con materiales de reciclaje y el trabajo de niños y adultos

Un sueño que comenzó a tomar forma poco a poco desde hace al menos siete meses. Un esfuerzo de decenas de vecinos, desde los más experimentados, hasta los más niños. Y una constancia que superó cualquier obstáculo y que hoy se ve reflejada en un espacio recuperado para toda la comunidad.

La plaza de El Higueral, en la comuna de Punitaqui , fue reinaugurada este viernes tras la intervención de las miembros del Centro de Madres “Las Emprendedoras” de El Higueral y los vecinos de la zona, quienes recolectaron distintos materiales de desecho y le dieron una nueva vida al recinto de 50x25 metros ubicado en el pasaje Las Mollacas con calle Espinos.

“La idea era además tratar de descontaminar un poco este ambiente, porque había muchas botellas en la calle, muchos neumáticos, muchas tapitas de bebidas, así que todo fue recolectado entre las socias, entre la comunidad, entre los niños del sector”, indicó a El Ovallino la presidenta del Centro de Madres, Janet Tapia.

En el lugar se hicieron algunos juegos con neumáticos, murales con tapas de bebidas, al menos un contenedor de tapitas, y los sombreaderos se realizaron con botellas plásticas y con tejidos hechos por las 17 socias del club.

“Contamos con la ayuda de colaboradores de Servicio País, además que postulamos a proyectos con los que se consiguieron las lanas para los sombreaderos tejidos. En el tema de los murales, vino un joven de Las Rojas, Gonzalo Ramírez, quien tenía experiencia con esa técnica. También la artista local Consuelo Rojas, pintó uno de los murales. Además los niños del programa 4/7 que se quedan en el colegio al terminar su jornada mientras las mamás trabajan, colaboraron activamente dibujando, diseñando la plaza y pegando tapitas. Fueron unos 30 niños entre 5 y 13 años de edad” explicó la dirigente social.

Destacó que cuando se diseñó originalmente la plaza era un proyecto para que se mantuviera en seco, por el tema de la sequía, y que luego estuvo abandonada por mucho tiempo hasta que el Centro de Madres decidió intervenirla.

“Ahora estamos regando la plaza con agua reciclada en un proyecto propio en conjunto con algunos vecinos”, apuntó Tapia, quien agradeció la colaboración de algunas empresas locales que aportaron materiales para los trabajos de remodelación.

 

 

 

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Diario El Ovallino