En diversas reuniones con vecinos se establecen las prioridades para los proyectos que se pueden financiar y construir
Con nuevos desafíos por delante, ya que se aprobó desde el año pasado el ingreso de Río Hurtado a la lista de comuna que pueden recibir el apoyo del Programa de Zonas Rezagadas para mejorar sus indicadores sociales, se está elaborando el plan de acción que buscará financiamiento para la construcción de obras comunitarias o proyectos sociales.
“Este programa viene a hacer justicia territorial, sobre todo para la gente del campo que por años ha sentido la ausencia del Estado. Para ellos tratamos de generar un nuevo impulso para el territorio”, explica a El Ovallino el coordinador regional del Programa, Rodrigo Gutiérrez, agregando que la propuesta “busca dar solución a las temáticas puntuales, con un enfoque propio y con decisiones locales, en la que la participación ciudadana es fundamental”.
Precisó el directivo que para lograr el objetivo de emparejar indicadores sociales en áreas rurales, los especialistas de su departamento levantan una cartera de iniciativas en las que puedan trabajar en los próximos cuatro u ocho años, con la participación directa de los ciudadanos desde sus diferentes lugares y organizaciones.
“El diagnóstico territorial es validado por los mismos vecinos y participantes. El programa busca desarrollar el territorio, basado en las necesidades detectadas por sus habitantes, para lograr generar incluso una gobernanza territorial para empoderar a los ciudadanos y que además puedan hacer un control social, que a veces no se tienen, sobre los servicios y las obras”.
Recordó el directivo que algunos de los proyectos que han sido auspiciados o que se han conseguido con el apoyo del Programa de Zonas Rezagadas son la pavimentación del camino Carén-Tulahuén, la ruta de Manquehua-Punitaqui, la reconstrucción de un Cesfam en Carén y la reposición de la escuela de Concentración Fronteriza de Tulahuén, entre otros.
“Nosotros tenemos una forma diferenciada de evaluar los proyectos, ya que al estar en Zonas Rezagadas no se evalúan como los otros proyectos públicos, que por lo general revisa el costo-beneficio (cuánto sale la inversión por cada habitante que se vería beneficiado), por lo que si es muy alta la rentabilidad social, no logra conseguir la Recomendación Satisfactoria del organismo evaluador. Pero al ser una iniciativa validada por la ciudadanía, el Ministerio de Desarrollo Social realiza una evaluación diferenciada, en la que el parámetro se remplaza por el de Costo-Eficiencia, por lo que nosotros aportamos con la evaluación diferenciada y con la obtención de este RS”.
Plazos y metas
Señaló Gutiérrez que la próxima semana culminarán con las rondas de participación ciudadana con temas de fomento productivo en Punta de Choros, donde esperan la participación de representantes vecinales de Vicuña, Río Hurtado y Andacollo, más los vecinos de Punta de Choros.
En esas instancias, desarrolladas con anterioridad en Río Hurtado, se han establecido cinco mesas temáticas: Agua y Medio Ambiente, Cultura e Identidad Local, Infraestructura y Conectividad, Mesa Social y de Seguridad Pública, y una última de Fomento Productivo.
“Los mismos vecinos y participantes escogen a los representantes de cada una de las mesas, quienes se encargan de conducir el proceso junto a los especialistas del programa. Nosotros como equipo nos juntamos con los servicios y finalmente presentaremos una cartera de proyectos a las autoridades nacionales y regionales”.
Agua y APR
Con respecto a la crisis hídrica, señaló que en la mesa creada para enfrentar esa situación los sistemas de APR lo que más piden son prospección de nuevas fuentes, profundización de los pozos existentes y en mejoramiento general de los sistemas, ya que algunos han cumplido al menos 20 años y ya se comienza a notar el paso del tiempo en sus estructuras.
“Hay algunos APR que pierden el 50% del agua que generan porque la distribución tiene muchas fugas, porque son muy antiguas y ya deben tener un mantenimiento mayor. Así que dentro de las líneas de trabajo tenemos que sacar un planteamiento para mejorar esos temas, a manera de hacerlos cada día más eficientes”.
Destacó que tienen bajo la lupa la planta de tratamiento con tecnología japonesa que se instaló en Río Hurtado, que aunque no contó con la asesoría de Zonas Rezagadas, indicaron que es una interesante propuesta que pueden replicar en otras comunas de la zona.
Calendario
Adelantó que en unas cuatro semanas deberían tener una cartera de proyectos con los cuales trabajar para desarrollar en el próximo año.
“El Consejo Regional debería aprobar esta cartera de proyectos, para que luego la Subdere pueda revisar, aprobar y financiar los proyectos a contar del año 2023”.
Indicó que aunque llevan ocho años trabajando con las comunas de Combarbalá, Monte Patria y Canela, y de las que ya deberían cerrar sus proyectos, tiene la expectativa de que aprueben una extensión del trabajo, para armar una nueva cartera de proyectos para esas comunas para el próximo año.
