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En este sector ubicado a tan solo 15 kilómetros de Ovalle la situación y estilo de vida cada día se vuelve más cuesta arriba, su sede social no cuenta con las condiciones óptimas, el agua escasea y además cuentan con caminos poco accesibles.

Loreto Flores Ardiles / Ovalle

Lo que podría haber sido una linda e inolvidable jornada navideña con la entrega de regalos para los pequeños y pequeñas de la localidad de Quebrada Seca de Sotaquí, ubicada entre la ruta que une las comunas de Ovalle y Monte Patria, terminó siendo una velada perjudicada por una serie de factores.Entre ellos, la falta de luz, baños y algo tan vital como lo es agua, condiciones esenciales que debería tener la sede comunitaria y que los vecinos esperan se solucione prontamente.

Ante esto, Diario El Ovallino se comunicó con la presidenta y el secretario de la Junta de Vecinos de Quebrada Seca, Susana Pizarro y Jonathan Pizarro, quienes contaron todo lo que tienen que pasar en la localidad hace años y sin respuestas satisfactorias hasta el momento.

“Estamos desde el año 2020 solicitando para la sede social, baños, camarines, electricidad fotovoltaica, además el arreglo del camino y agua, el municipio nos viene a dejar agua cada veinte días, se demoran demasiado, por parte de ellos casi no tenemos ayuda”, indica el secretario, Jonathan Pizarro.

En tanto, la presidenta de la Junta de Vecinos, Susana Pizarro, agrega que, “antes teníamos agua en la copa comunitaria, la que se ocupaba tanto para la sede como para la comunidad pero ahora el suministro está suspendido hasta marzo. En el lugar no contamos ni con luz ni con baños”, habló la dirigente.

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No fue hasta el sábado 17 de diciembre, día de la entrega de regalos a los niños y niñas del sector, que la situación sobrepasó a algunos de los habitantes de la localidad rural.“Fue el día de la entrega de regalos en la sede, habían más de treinta niñitos, entonces tanto los niños como las damas necesitaban usar el baño y simplemente nosotros no contábamos con esos servicios. Además la gente se trasladó a la sede social porque las casas de nosotros son separadas, entre uno a dos kilómetros y para llegar a este lugar el camino está súper malo”, agregó el secretario de la junta de vecinos.

En este sentido, no solo está situación permitió los descargos de los vecinos, sino que son una serie de hechos que datan desde hace tiempo, pero que se materializaron hace aproximadamente dos años. 

“Desde el 2020 hemos hecho llegar estas peticiones a la municipalidad de Ovalle, tanto al alcalde de ese entonces Claudio Rentería como también al alcalde subrogante Héctor Vega, pero hasta el momento no hemos obtenido nada, no han pasado nuestro proyecto al Concejo para que sea aprobado”, relató el secretario.Al respecto, la presidenta de la junta de vecinos, asevera que este año no pudo concretarse el proyecto esperado, “el proyecto estaba, pero estos no se pudieron postular ya que la cuenta del banco estaba vencida, nos dijeron que no se podía hacer nada sin esa cuenta y cuando se hizo el trámite ya era muy tarde, como junta de vecinos esperamos volver a postular en marzo”.

OTROS PROBLEMAS

Asimismo, en el caso de la luz, tan necesaria para la realización de actividades, los vecinos han tenido que sortear varios inconvenientes, como en el caso de realizar reuniones en completa oscuridad o pedir prestada una sala de la escuela del sector, a pesar de tener un espacio grande que puede albergar un importante número de vecinos para este tipo de instancias.

Pese que esta localidad solo queda a unos 20 minutos de la capital del Limarí, para los vecinos y lugareños se vuelve una odisea trasladarse a la comuna, tanto por la escasa locomoción pero también por algo que es irremplazable, como lo es un buen camino para trasladarse.

En esta línea, la dirigente vecinal enfatizó la mayoría del camino es privado y eso genera que el municipio se demore en interceder “tuvimos una reunión con las personas de la Asociación Pizarro, el camino es privado y ellos no quieren que el municipio ponga máquinas, desde el municipio solo podrían hacer reparaciones”, puntualizó.Finalmente, a pesar de los intentos e insistencia de Diario El Ovallino, hasta el cierre de esta edición no fue posible contar con una respuesta o posible solución por parte del municipio hacia los vecinos de la localidad. Lo que arroja que estos tendrán que esperar por el momento, en este caso por la postulación de un nuevo proyecto para el próximo año y así poder contar estos servicios básicos tan necesarios para la sede comunitaria. 

 

 

 

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