Una tensa y delicada situación se ha vivido al interior de la Residencia Niño y Patria en la población Atenas de Ovalle, en la que la rutina y el esparcimiento se han visto afectados por la pandemia y los funcionarios y “tíos” han visto con preocupación algunas agresiones en las últimas semanas.
A través de una constancia presentada ante la Inspectoría del Trabajo local, los funcionarios del recinto de acogida acusan una serie de anomalías y situaciones de riesgo que incluso les ha afectado física y psicológicamente, al punto de tener que suspender sus labores y abandonar el lugar ante lo que han considerado un “riesgo grave” a su salud.
Algunas de las consecuencias de “reiteradas agresiones” al personal, según manifestaron a El Ovallino, se reflejarían en prolongadas licencias médicas y psicológicas presentadas por varios de los más de 20 funcionarios, lo que ha obligado al resto a duplicar los esfuerzos para atender a los ocho niños y jóvenes que residen en el lugar.
Trabajo en conjunto
En tanto, la directora del Servicio Nacional del Menor Coquimbo, Sename, Verónica Zárate, señaló que la situación se ha trabajado de manera permanente con la Fundación Niño y Patria, quien tiene a cargo la administración de la residencia.
“Se han hecho labores para implementar mejoras especialmente en aspectos de fortalecimiento y especialización del recurso humano, fortalecer las rutinas y las actividades socio educativas como apoyo en el análisis de los casos y las necesidades de los niños y jóvenes", indicó Zárate.
Reconoció que durante las últimas semanas, han sido informados que algunos residentes de la institución, dependiente de Fundación Niño y Patria y subvencionada por el Servicio, han realizado abandonos del recinto, en el contexto de desajustes conductuales por la situación actual de alerta sanitaria por covid-19 que tiene al centro de protección en cuarentena desde el pasado 15 de marzo, junto a todos los otros centros colaboradores del Servicio Nacional de Menores a nivel nacional.
“En todas las situaciones acontecidas, los trabajadores en turno han activado los protocolos para persuadirlos de dicha decisión. Cabe señalar que los adolescentes no están privados de libertad, al tratarse de un centro de protección y no de justicia juvenil. Es decir, se trata de niños y jóvenes que han sufrido graves vulneraciones de sus derechos. Se tomó conocimiento que el pasado 2 de septiembre, tres adolescentes apedrearon dos casas del sector, siendo una de ellas la de la ex directora del centro, por lo cual los afectados realizaron la denuncia ante la Fiscalía. Paralelamente se ha contado con el apoyo permanente de Carabineros de Chile, quienes realizan rondas periódicas”.
Cambios de rutina
Resaltó la directora que la cuarentena por Covid-19 ha generado un funcionamiento extraordinario de los sistemas residenciales, en donde la rutina habitual se ha visto modificada por la falta de clases presenciales, la imposibilidad de realizar salidas al aire libre o de mantener visitas con sus familiares y referentes significativos, lo que ha producido conductas regresivas y desajustes conductuales en los jóvenes.
“Es por ello, que solicitamos la colaboración de los vecinos y vecinas, y su comprensión ante esta crisis pandémica y las consecuencias que está trayendo a niños, niñas y jóvenes no sólo en sistema residencial, sino que de toda la comuna. Como Servicio Nacional de Menores de la Región de Coquimbo, hemos estado atentos a las situaciones ocurridas en la residencia, prestando asesoría clínica, generando supervisiones presenciales y desarrollando actividades de esparcimiento vía remota que puedan mejorar la rutina de los niños y jóvenes al interior del recinto. También, junto al centro semicerrado de La Serena se está trabajando en una capacitación para el equipo técnico de la residencia en metodologías de intervención en crisis”.
Reiteró que desde el Sename realizan un esfuerzo por trabajar de manera mancomunada con todos los actores de la comunidad ovallina, en la labor de generar un plan de mejoras con plazos establecidos, con el fin de resguardar la protección de niños, niñas y adolescentes.
