crimen

Jorge Naranjo de la Cerda, de 40 años y residente de la comuna de Ovalle, fue encontrado sin vida al interior de un vehículo abandonado en la toma “Los Changos”, de la comuna de Coquimbo. Las circunstancias de su muerte aún son desconocidas, aunque se estableció que presentaba heridas con un arma cortante.

Tras las últimas diligencias realizadas por los cuerpos de investigación, se habría logrado individualizar al presunto responsable del asesinato de un hombre de 34 años de edad, en un terreno desocupado en las inmediaciones del Estadio Diaguita.

El chileno se encontraba viviendo en una casa de la localidad bonaerense de Ciudad Evita. Al momento del procedimiento, se le sorprendió con un vehículo robado con patentes adulteradas y estuvo a punto de enfrentarse a balazos con agentes federales.

Tras meses eludiendo la justicia, Miguel Vega Pérez, alias “El Chuma”, fue encontrado en Buenos Aires, donde fue detenido por personal de la Interpol la tarde de ayer. Las autoridades nacionales tramitan su extradición, para ponerlo a disposición de la justicia.

Si bien el sujeto ya está individualizado y se han allanado siete casas de familiares y amigos en diversos puntos de la región, no ha podido ser arrestado a más de un mes del crimen de Agustina Ceballos y su padre.

Si bien la PDI declinó entregar antecedentes sobre el caso, según información recabada por nuestro medio, las diligencias estarían bien encaminadas. En tanto, la familia exige mayor celeridad en las indagatorias.

El hecho, ocurrido en calle Regimiento Arica, fue advertido por las autoridades cuando la madre del presunto autor comprobó que Paula Martínez Espinoza (37) murió producto de diversas puñaladas. El sujeto también se infirió heridas, luego de poner fin a la vida de una mujer muy querida en su tierra de origen, Río Hurtado, donde no dan crédito a lo sucedido.

La víctima identificada como Víctor Alvarado Cortés fue encontrada por su pareja en un domicilio al final de calle Libertad. En el lugar no se hallaron armas de fuego.

Los dos hombres, uno de ellos su conviviente, habrían propinado golpes reiterados en la cabeza, tórax y abdomen de la víctima, además de cortes superficiales con un arma blanca, mientras ella estaba amarrada de pies y manos y gritaba por ayuda. Sus graves lesiones terminaron causándole la muerte tras días de sufrimiento.