En el contexto de su aniversario número 35, Fundación Integra distinguió a la agente educativa Susana Guerrero Valdivia, de la sala cuna y jardín infantil Sol de Oro, de la comuna de Río Hurtado, quien recibió el Premio Valor Integra 2025.
35 años de labor educativa cumplió Fundación Integra y los celebró con la entrega de una serie de reconocimientos a sus trabajadoras y trabajadores. La principal distinción recayó en la asistente de párvulos Susana Guerrero Valdivia, de la sala cuna y jardín infantil Sol de Oro, de la localidad rural de Pichasca, en Río Hurtado, quien recibió el Premio Valor Integra 2025.
Este honor es parte de una iniciativa nacional que premia a una persona en cada una de las regiones del país. Busca relevar a quien represente los valores institucionales de Fundación Integra, como el fomento y apreciación de la diversidad, la promoción de la justicia educativa como un derecho humano, la participación, colaboración e integridad en cuanto a favorecer el respeto a los derechos de niñas y niños.
En el caso de Susana Guerrero, su comunidad educativa la nominó destacando en ella su trayectoria, compromiso institucional y calidad humana. “Su liderazgo se manifiesta día a día a través de su capacidad de acompañar, orientar y fortalecer al equipo educativo, generando un ambiente de trabajo basado en la confianza, el respeto y la colaboración.
A pesar de haber estado dos años fuera del ejercicio directo en aula para dedicarse al cuidado de su hijo Moisés -quien presenta una condición médica compleja, que requería de acompañamiento integral-, ella retornó al establecimiento con una renovada vocación, nuevos saberes y una mirada transformadora sobre la educación, la inclusión y el desarrollo holístico de niñas y niños”, sostuvieron en su postulación.
Su equipo de trabajo agregó que “su experiencia personal ha fortalecido su sensibilidad hacia las familias y su comprensión de la educación como un proceso integral, que acoge, respeta y transforma, aportando una visión profundamente humana al quehacer pedagógico del jardín. Su ejemplo de resiliencia y amor maternal ha inspirado a sus compañeras y compañeros, reafirmando la importancia del equilibrio entre el bienestar personal, familiar y laboral”.
Susana Guerrero agradeció este premio y las cualidades que sus compañeras dieron a conocer. “No lo podía creer, estoy agradecida del equipo, de mi directora por su apoyo en todo este tiempo, siempre que he necesitado. Gracias a mis compañeras que dieron su fundamento para elegirme y nunca pensé ganar este premio porque muchas compañeras lo merecen. Estoy muy agradecida, emocionada por el apoyo, cercanía y preocupación. Un abrazo a mi equipo, gracias a todas y a la Fundación por este premio”, dijo.