Aunque el número de campamentos ha aumentado en los últimos años, el Ministerio de Vivienda asegura que el 82,7% cuenta con estrategias de intervención activa. La autoridad explica que las diferencias en las cifras responden a criterios técnicos para definir y priorizar los asentamientos.
Medidas concretas para beneficiar a las familias y disminuir los asentamientos precarios impulsa el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) en la Región de Coquimbo. Si bien la dinámica habitacional de la zona ha favorecido el crecimiento de campamentos, actualmente el 82,7% de estos cuenta con una estrategia de intervención por parte del Departamento de Asentamientos Precarios.
Según cifras oficiales, en la región existen 52 campamentos vigentes, que agrupan a 2.204 hogares, lo que representa el 3,6% del total nacional. No obstante, entre 2022 y 2024 se registró un aumento de nueve nuevos asentamientos, fenómeno explicado principalmente por la migración y el encarecimiento del costo de la vida.
DIFERENCIAS EN LOS CATASTROS
Hace algunos días, TECHO-Chile informó que estos 52 campamentos se concentran principalmente en las comunas de La Serena, Ovalle y Coquimbo, y que en ellos viven 3.253 familias, lo que representa un aumento del 41,6% en el número de hogares. Desde la organización señalan que esta realidad se explica por el alto costo de los arriendos, los bajos ingresos y la necesidad de independencia habitacional, factores que han llevado a muchas familias a optar por un campamento como última alternativa.
Desde el Minvu, el seremi de Vivienda, José Manuel Peralta, explicó que las diferencias entre las cifras se deben a los criterios técnicos utilizados para definir los asentamientos a intervenir.
“Son distintos criterios para reconocerlos como campamento a intervenir. El de TECHO es un catastro de la sociedad civil, un censo general. La situación de los campamentos, así como la de las familias allegadas y el alto valor de los arriendos, son síntomas de la crisis habitacional en Chile que el presidente Gabriel Boric reconoció desde el primer día, y por eso se desarrolló el Plan de Emergencia Habitacional, con el cual este mes cumpliremos la meta de 12.490 soluciones habitacionales en la región y esperamos superar las 13 mil viviendas durante el actual gobierno”, señaló.
El seremi agregó que los campamentos forman parte de un área prioritaria de atención, “sin saltarse la fila, ya que las familias que acceden a soluciones habitacionales deben cumplir con las mismas condiciones que cualquier otra familia”.
MIGRACIÓN COMO FACTOR
Otro de los factores que ha incidido en la conformación de nuevos campamentos es la migración. De acuerdo con estudios del Minvu en la región, se identifican 1.433 familias inmigrantes viviendo en asentamientos, de las cuales 430 son colombianas, 404 venezolanas y 251 haitianas.
El principal desafío para la radicación o relocalización definitiva está relacionado con la situación migratoria. Al respecto, el seremi Peralta indicó que el 64% de las familias en campamentos con presencia de inmigrantes se encuentra en proceso de regularización.
“Mientras estas familias no obtengan residencia definitiva —requisito para acceder a una solución habitacional— no pueden postular a subsidios, lo que dificulta enfrentar la problemática de los campamentos”, añadió.
¿QUÉ SE HA HECHO?
El Programa de Asentamientos Precarios forma parte del Plan de Emergencia Habitacional, iniciativa que busca acelerar las respuestas del Estado frente al déficit de vivienda. La estrategia del Minvu se ha enfocado en dos líneas de acción entre 2024 y 2025.
La primera es construir barrios, orientada a la radicación, con intervención en 17 campamentos que agrupan a 451 hogares, mediante obras de urbanización y mejoramiento del entorno. La segunda es la gestión habitacional o relocalización, que atiende a 16 campamentos con 580 hogares, avanzando hacia viviendas nuevas en otros terrenos.