Thiare Leiva, de la comuna de Ovalle, se trasladó al país vecino para ver al equipo de sus amores, pero jamás pensó que ese viaje se transformaría en una verdadera pesadilla. Acusó que en el estadio no había guardias ni policías para resguardarlos ante los ataques de los hinchas del cuadro de Independiente.
“Lo que debería haber sido un viaje inolvidable terminó en la peor pesadilla que pude vivir”.
Así comienza el crudo relato de Thiare Leiva, una hincha de la Universidad de Chile, quien viajó desde la comuna de Ovalle hasta el otro lado de la cordillera para acompañar al club de sus amores, en su partido frente a Independiente de Avellaneda por la Copa Sudamericana.
La joven, a través de un posteo en sus redes sociales, contó los detalles de la jornada, denunciando que en la zona que ubicaron a la parcialidad azul, en el estadio Libertadores de América, no había guardias ni policías para resguardarlos ante el ataque de los hinchas del cuadro de Avellaneda.
“Corrí por mi vida, el susto fue horrible pensé que me iban a matar. Fue tanto el shock que corrí que no sentía dolor. No sentía como me corría la sangre por mi cabeza, hasta que llegué al bus pero aun así no estábamos a salvo porque nos querían reventar el bus”, detalló.
Thaire agregó que “a mí me pegaron con botellas los hinchas de independiente, las ‘pacas’ del pelo me arrastraron por el piso, me patearon en vez de ayudarme a arrancar”.
PROBLEMAS EN EL INGRESO AL ESTADIO
En el posteo, la joven cuenta que los hinchas del cuadro estudiantil tuvieron que ingresar al recinto deportivo cuatro horas antes del pitazo inicial. Pero ya desde esos momentos comenzaron los problemas.
“Desde el principio supimos que todo estaría mal. La entrada al estadio fue un asco, no había un orden policial, nos empujaron, nos pegaron y no nos dejaban ingresar siendo que todos íbamos con nuestras entradas. Jamás armamos alboroto antes del partido. De tanto insistir pudimos ingresar primero las mujeres y menores de edad… porque sí, habían muchos menores. Estábamos rodeados de hinchas de Independiente abajo de tribuna y en ambos costados”, afirma.
MOMENTOS DE TERROR
Al finalizar los primeros 45 minutos del primer tiempo, la hincha detalla que desde ese momento comenzó a escalar el conflicto. Primero fueron insultos y tras eso los hinchas argentinos comenzaron a lanzarle objetos.
“Terminó el primer tiempo del partido y empezaron los insultos. Ellos partieron agrediendo a nuestra hinchada, tiraban piedras, fierros, botellas y todo lo que pudieran encontrar. La puerta de abajo era tan débil que por más que aguantamos la botaron. Ellos no iban a pelear, ellos entraron a matarnos”, afirma.
Agregó que estaba comprando cuando botan una puerta de acceso y los mismas hinchas de la “U”, comenzaron a proteger la zona para evitar que salieran lastimada el resto de la gente que se encontraba en la tribuna visitante. “Yo estaba comprando algo para comer cuando siento que botan la puerta y todos corren. Si no fuera por otro chico que me toma en brazos y me sube corriendo a tribuna me pillaban abajo. Mis respetos a todos los hinchas que pusieron el aguante abajo para resguardar a las mujeres y niños”, dijo.
Thiare acusó que durante esos instantes la presencia policial fue nula. “La policía jamás entró a resguardarnos. Nosotros nos defendimos como pudimos”, asegura.
La joven de la comuna de Ovalle afirmó que fueron golpeados cuando se les ordenó salir de las inmediaciones del estadio del Rojo, además que le fueron robados diversas especies como dinero, ropa y teléfonos.
“Arrancamos de las mangas laterales por donde sí o sí debíamos pasar para salir, y nos tiraban botellas y piedras. Era una lluvia de objetos que nos golpeaban. La policía afuera en vez de ayudarnos a salir, nos veían corriendo y nos agarraban, nos pegaron”, relató en la publicación de su cuenta de Facebook.
Por si fuera poco, añade, al regresar al país la joven se encontró con la noticia de que las fronteras estaban cerradas. “No tenemos resguardo, estamos en medio de la nada. Esperando ver que podemos hacer para irnos de aquí”, escribió.