El accidente en el que falleció inicialmente una persona de forma automática, el pasado 14 de junio, cobró una segunda víctima tras estar dos semanas internado en el Hospital de Coquimbo. Miembro del Club de Rayuela y del Club de Huasos de Potrerillos Alto fue despedido por familiares y amigos
Con gran pesar familiares y amigos despidieron a Roberto Araya Pastén (67), quien sería la segunda víctima fatal del accidente ocurrido el pasado 14 de junio en la ruta D-55, que ya había dejado una persona fallecida de manera instantánea.
Araya Pastén resultó con heridas de gravedad que ameritaron su internación en el Hospital de Ovalle y luego su traslado al de Coquimbo, aunque los esfuerzos médicos fueron infructuosos ya que falleció la mañana del pasado viernes.
El accidente se produjo en las inmediaciones del Puente El Monte, conocido como el sector “los tubos”, hasta donde se dirigieron los equipos de emergencias. Se trató de una colisión frontal con posterior volcamiento que dejó un fallecido y dos lesionados.
Despedida
Tras el deceso, sus familiares y amigos pudieron despedir al reconocido profesional del volante, señalando su arraigo con la localidad que lo vio nacer y a la que dedicó gran parte de su vida.
Daniela Araya, hija de don Roberto, señaló a El Ovallino que el profesional trabajó mucho tiempo en buses, en colectivos y en radio taxi.
“Transportó mucha gente, así que era muy conocido en Ovalle y en sus alrededores, en La Serena, Punitaqui, Combarbalá, y sobre todo en Potrerillos Altos, donde había nacido. Además era muy activo en la rayuela, que era una actividad sagrada para él. Los viernes o los fines de semana eran una acctividad fija en su vida, y siempre participó en torneos locales y regionales. Participó mucho con el Club Ferroviarios de Ovalle, y tuvo mucha actividad en la región”, apuntó.
Señaló que -además de padre de ocho hijos- también fue corralero toda su vida, y fue miembro activo del Club de Huasos Potrerillos Altos.