Dos parlamentarios recientemente electos y dos que lograron la reelección, analizaron las urgencias y proyectos que deberán abordarse desde el 11 de marzo de 2026, destacando la sequía, la seguridad y la reactivación económica, aunque sin dejar de lado la promoción de derechos sociales.
Faltan poco más de dos meses para que asuma el nuevo Congreso, el que, para el caso de la Región de Coquimbo contará con la presencia de tres rostros nuevos: Eileen Urqueta, Erich Gross y Bernardo Salinas, además de los diputados reelectos Marco Antonio Sulantay, Carolina Tello, Nathalie Castillo y Daniel Manouchehri.
Consultada por El Día, Eileen Urqueta, diputada electa por el Partido de la Gente, señaló que desde el 11 de marzo el Congreso debe concentrarse en las urgencias transversales del país. “La primera es seguridad ciudadana, abordada de manera integral: prevención, recuperación de espacios públicos, fortalecimiento del rol municipal y apoyo efectivo a Carabineros y a las policías”, sostuvo.
“La segunda es salud pública, con foco en reducir listas de espera, fortalecer la atención primaria y asegurar financiamiento estable para los territorios. La tercera es la reactivación económica y el empleo, priorizando a las pymes, el trabajo local y la inversión con reglas claras. Y, de manera transversal, avanzar en vivienda, servicios básicos y protección social, con políticas que lleguen oportunamente a las familias”, agregó.
En paralelo, para la Región de Coquimbo indicó que es fundamental tener una mirada territorial clara. “En Elqui, el eje central es la crisis hídrica y la gestión del agua, avanzando en soluciones estructurales como embalses, reutilización, eficiencia y gobernanza del recurso, junto con inversión en infraestructura sanitaria y un fortalecimiento decidido del turismo y los servicios”, dijo.
“En Limarí, la prioridad es enfrentar la sequía prolongada con apoyo directo a la agricultura y a los pequeños productores, mejorar la conectividad rural, y reforzar el acceso a salud y servicios públicos en comunas más aisladas. En Choapa, el desafío es impulsar un desarrollo productivo equilibrado, donde la minería conviva con el cuidado ambiental y el bienestar de las comunidades, junto con avanzar en vivienda, conectividad e infraestructura pública que permita mejorar la calidad de vida”, esbozó.
PRIORIDADES DE PARLAMENTARIOS REELECTOS
En tanto, para Carolina Tello, diputada reelecta por el Frente Amplio, el nuevo Congreso tiene la obligación de seguir trabajando en los temas que son prioritarios y urgentes para la ciudadanía.
“Seguir avanzando en seguridad, empleo para las regiones, viviendas para estrechar en lo que falta el déficit habitacional en nuestro país. La salud, el transporte, el sistema nacional de apoyos y cuidados debe seguir avanzando para que quienes cuidan, que en su mayoría son mujeres, dejen de ser postergadas y sean reconocidas por toda la sociedad. Las personas nos eligen para trabajar por soluciones por lo que en eso hay que poner el énfasis y no perder tiempo en peleas ideológicas ni en bloquear proyectos por cálculo político. La ciudadanía espera soluciones concretas, no excusas, ni retrocesos en derechos”, remarcó.
Por su parte, Daniel Manouchehri, diputado reelecto por el Partido Socialista, afirmó que “la seguridad, empleo y salud son áreas urgentes para atender. Agregaría a la necesidad de tener un gran acuerdo en contra de la corrupción. Lo que ha pasado con la corrupción en nuestras instituciones debilita cualquier tarea, y por tanto debería ser parte de la agenda”.
UN ROSTRO NUEVO EN EL CONGRESO
Para Bernardo Salinas, diputado electo como independiente en cupo del Partido Comunista, existen temas muy relevantes e importantes que deberá abordar el Parlamento a partir del 11 de marzo.
“Nosotros en la región, a propósito del déficit de vivienda digna, solo pudimos lograr un tercio dentro del Plan de Emergencia Habitacional, y yo creo que tenemos que seguir profundizando en un banco de suelo para poder seguir construyendo viviendas, porque tenemos un déficit y no es menor, y sobre todo donde más se ve y se manifieste ese déficit, ese es el efecto rural. Con respecto al tema hídrico, claramente tenemos que avanzar para que declaremos a la región una región árida. Si no lo hacemos así, vamos a vivir permanentemente en decretos de catástrofe o en una emergencia hídrica, lo que no resuelve el tema, porque siempre abordamos esta aridez desde el punto de vista de las emergencias y no como una política de Estado permanente. Eso para nosotros debe ser relevante y eso obviamente tiene que ver con una serie de obras que son esenciales”.
En otro orden de cosas, subrayó que “tenemos que avanzar en darle una prioridad y un resguardo, yo diría incluso hasta constitucional, a la agricultura familiar campesina, declarándola como algo estratégico”