El chileno-canadiense Julio Moreno Rayneld-Franco llegó en octubre a Ovalle, a integrar el cuerpo técnico de René Kloker para el torneo 2020. Su misión sería la de ayudante técnico, pero tras la desvinculación del argentino de la banca, la dirigencia del club decidió que asumiera con propiedad la dirección técnica en el campeonato de Tercera A que comienza este sábado.
Una misión de ribetes mayores, ya que el “ciclón” se propuso ascender a la Segunda División, para lo cual, Moreno deberá comendar al equipo y llegar al menos hasta la final del torneo corto, donde debuta este sábado a las 18.00 horas ante Trasandino de Los Andes en el estadio municipal de San Felipe.
De padre chileno y madre canadiense, Moreno integró la selección sub 17 de Canadá, pero una rebelde lesión lo privó de tener continuidad en aquel equipo. Fue así como decidió inclinarse por los estudios universitarios en forma paralela. Jugó en Estados Unidos, Canadá y tuvo opciones de fichar en la tercera división del fútbol argentino, pero sus lesiones lo impidieron. Fue momento en que se inclinó por los estudios para alistarse como entrenador de fútbol, donde integró principalmente los cuerpos técnicos de Jaime Vera en Deportes Iquique y en el OFI FC de Creta, en la primera división de Grecia, para posteriormente quedar a cargo de los equipos sub 13 y sub 14 de Deportes Puerto Montt.
Con esta experiencia, no se hace problemas con el poco tiempo de preparación en cancha del plantel para afrontar de inmediato el desafío por el ascenso.
“Lo bueno es que tengo mucha experiencia y ya he trabajado con temporadas de preparación cortas, con temporadas de tres a cuatro meses. Esto no es nada nuevo, pero eso sí es una categoría nueva para mí como la Tercera División, pero con la experiencia de haber trabajado en clubes de Primera y Segunda División, fútbol formativo, fui técnico universitario y esto es un proceso donde hay que apurar y para que aprendan los jugadores más rápido la manera que quiero que jueguen; la táctica, táctica fija, pero todo tiene un proceso. Solo hay que apurar el proceso para poder llegar al final de buena forma y que el equipo esté bien posicionado para lograr el objetivo”, afirmó.
Una buena base dejó Kloker, donde parte del actual plantel se mantienen desde el 2019. Con un equipo “aceitado”, pero sin fútbol, Moreno ocupará aquellos cimientos para disputar el torneo.
“Todo trabajo que haya realizado un anterior técnico ayuda, porque ya tienes una base. Lo que hago con esa base es que la trato de transformar a mi manera de ver el fútbol, pero la base está allí, los jugadores se conocen y están acostumbrados. Ahora se tienen que acoplar a mi forma de jugar y hacer las cosas, aprendiéndose de a poco, ya que es un proceso que toma tiempo y con un campeonato corto hay que apurar ciertas cosas para ganar tiempo, como con el video, la táctica, ayudándonos el cuerpo técnico para ganar tiempo”, aseguró.
Moreno estará a cargo del equipo, el cual deberá comenzar inmediatamente con el pie derecho. Su primer escollo será Trasandino, rumbo al ascenso