ANFA aceptó formalmente la postulación del club, sellando su retorno a la competencia nacional luego de casi una década de ausencia. El hito marca el cierre de un extenso proceso institucional y abre una nueva etapa enfocada en la consolidación deportiva y el fortalecimiento del fútbol formativo.
Una noticia largamente esperada por la hinchada de los Ultra Verde y el fútbol local se confirmó este viernes 19 de diciembre de 2025. La Asociación Nacional de Fútbol Amateur (ANFA) oficializó la aceptación de la postulación del Deportes Ovalle, autorizando su participación en la Tercera División B temporada 2026. Con ello, el club ovallino vuelve al fútbol organizado tras registrar su última participación oficial en 2016.
La confirmación llegó mediante un oficio formal emitido por ANFA, documento que ratifica que Deportes Ovalle cumplió con los requisitos exigidos para integrarse al torneo. La resolución pone fin a un prolongado periodo de ausencia competitiva y cierra un proceso que estuvo marcado por años de gestiones, reorganización institucional y persistencia dirigencial.
Para el presidente del club, Luis Carlos Contreras, el momento tiene un profundo significado emocional y deportivo. “El no ver a Deportes Ovalle jugar durante tantos años fue una pena muy grande. Recibir esta noticia es algo que esperábamos hace mucho tiempo”, señaló, aludiendo al sentimiento compartido por generaciones de hinchas que crecieron vinculados al club verde.
LA CONFIRMACIÓN OFICIAL DE ANFA
Si bien la oficialización se conoció esta semana, el dirigente explicó que el retorno comenzó a tomar forma meses atrás. En marzo de este año, durante una reunión sostenida en Santiago con el directorio de ANFA y de la Tercera División, el club fue informado de que estaba considerado para competir en 2026. “Fue un momento muy emocionante. Hoy, con la carta oficial en la mano, ya es una realidad”, afirmó.
El camino de regreso no estuvo exento de dificultades. Entre los principales desafíos, la dirigencia debió resolver la situación de la marca Deportes Ovalle, que pertenece a la familia Massú y enfrentar dos rechazos previos a la postulación. Finalmente, tras presentar una apelación formal y realizar gestiones ante distintas instancias del fútbol nacional, la solicitud fue acogida de manera favorable.
EL ROL DEL FÚTBOL FORMATIVO EN EL PROYECTO
En paralelo, el club apostó por fortalecer su base institucional a través del fútbol formativo. Actualmente, la Escuela de Fútbol de Deportes Ovalle cuenta con más de 120 niños y niñas, y se ha consolidado como uno de los pilares del proyecto deportivo. “La idea es que los chicos tengan un camino real dentro del club y que a futuro, puedan llegar al plantel de honor”, explicó Contreras.
De cara a la temporada 2026, la dirigencia ya comenzó el trabajo en cancha. A comienzos de diciembre se realizaron pruebas masivas en el Estadio Diaguita, donde participaron cerca de 160 jugadores provenientes de Ovalle y distintos puntos de la provincia del Limarí. De ese proceso surgió una preselección que iniciará entrenamientos en febrero, con miras a definir el plantel definitivo a partir de marzo.
CONSOLIDAR ANTES DE PROMETER ASCENSOS
Respecto a los objetivos deportivos, el presidente fue enfático en recalcar que el primer año estará marcado por la prudencia. “No queremos crear falsas expectativas. El objetivo inicial es consolidarnos dentro de la división, tanto deportiva como económicamente”, sostuvo, agregando que, si bien se buscará conformar un equipo competitivo, el ascenso no se plantea como una meta inmediata.
Más allá del regreso deportivo, Contreras enfatizó el carácter institucional del proceso. “Lo importante no son las personas que conforman este directorio, lo realmente importante es la institución. Nosotros estamos de paso, Deportes Ovalle es para siempre”, afirmó, subrayando el compromiso del directorio de trabajar de manera ordenada y responsable para evitar errores del pasado.
El retorno de Deportes Ovalle a la Tercera División B no solo representa una buena noticia para el club, sino también para el fútbol de la provincia del Limarí, que volverá a contar con un representante histórico en la competencia nacional. Tras casi una década de espera, la ilusión vuelve a rodar en la cancha.