Santiaguino radicado en España desde hace 20 años, Pablo Potocnjak, le da vida desde mayo de 2017 al Señor de los Trompos, una colorida obra familiar con la que ha recorrido distintos puntos de Europa y de Chile.
La obra es la segunda parte de una trilogía teatral llamada Trapezi, y mezcla humor, música e ilusión circense en un montaje de la compañía Penélope y Aquiles, que se presentó el miércoles en Sotaquí y el jueves en La Chimba, mientras que este viernes le tocará el turno a Cerrillos de Tamaya.
“El Señor de los Trompos es parte de una ‘trilogía giroscópica’ de la compañía, La primera parte se llama El Butifarra, que es un personaje popular creado en tierras catalanas, aunque fue adaptado luego a la cultura chilena. La última parte de la trilogía no está lista todavía, se mantiene en preparación”, indicó el artista.
Explicó que en la primera parte los trompos tenían una aparición de unos 10 minutos, pero que luego decidió crear una obra que girara en torno a estos tradicionales juguetes universales.
“Es un presentador de circo, un charlatán que tiene una relación y un vínculo emocional con sus trompos a quienes presenta como su elenco internacional. Cada trompo es un personaje con sus características, sus tamaños y colores. Hay uno muy pequeñito que muestra los primeros giros de un trompo, luego tiene un trío de oriente: Chilpán, Chil Lu, Chilaiwa, hay un artista local que busca probar suerte, está el cocinero que es un italiano grandote que se llama Giuseppe Trottola, está Madamme Toupié que es una equilibrista francesa, y así va creando un espectáculo de circo con juguetes que se pueden conseguir en todos los países”, explicó el artista.
Con cinco presentaciones pautadas para una gira en la comuna de Ovalle, las dos últimas debieron suspenderse por el sorpresivo anuncio de las autoridades sanitarias de decretar el retroceso de la comuna a la Fase de Transición o fase 2.
