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Alcaldes de comunas rurales del Limarí, lamentan que, tras la pandemia de Covid-19, la cual dejó en evidencia la falta de acceso a las tecnologías de la información que sufren sus habitantes, dicha realidad no haya cambiado en lo fundamental, manteniéndose las mismas dificultades y carencias hasta el día de hoy en dichos territorios.

La pandemia por el coronavirus no solo significó un desafío en salud, sino también en conectividad digital, ya que el quehacer cotidiano de la población debió adaptarse a las medidas sanitarias recomendadas por las autoridades.

En este sentido, algunas personas debieron realizar teletrabajos, mientras los estudiantes debían “asistir” a sus clases a distancia, conectándose a través del internet.

De esta manera, se evidenció la brecha digital presente en los sectores rurales, ya que muchos estudiantes debían recorrer kilómetros en los cerros para alcanzar señal que les permita conectarse a las clases.

Gracias al exitoso proceso de vacunación, la pandemia fue quedando en el pasado, pero no así la mencionada brecha digital, la que sigue presente en las comunas rurales de la provincia.

Así fue manifestado por autoridades de la ruralidad, quienes reconocieron escasos avances tras lo que fue la emergencia sanitaria. 

En la comuna de Río Hurtado por ejemplo, manifiestan que proyectos que tendrían que estar concretados han sido postergados, ante lo cual piden mayor empatía

“Aún persiste la brecha digital en los sectores rurales, al menos en Río Hurtado aún seguimos con las mismas dificultades. Existe un proyecto de fibra óptica desde Hurtado hasta el sector bajo, sin embargo, es una obra que aún está sin terminar, tenía fecha de término en octubre de 2022, cosa que no fue recepcionada por diferentes problemáticas en la instalación. Por otra parte, el resto de las antenas no cuentan con autonomía suficiente, aun así existen informes de la Subtel donde ellos debieran tener autonomía de 8 horas o diferentes tipos de horarios, cosa que tampoco se cumple, porque cuando se corta la luz se corta inmediatamente lo que es conectividad.”, indicó la alcaldesa Carmen Juana Olivares.

Ante esta situación, la jefa comunal riohurtadina hace un llamado a la empatía de las autoridades competentes en la materia, “aún existe la brecha digital, y esperamos que se tome un poco más de conciencia con las personas que vivimos en la ruralidad, tenemos estudiantes y postas y estaciones médico rurales que dependen de ingresar datos a los sistemas, así que esperamos que se ponga un poquito más de corazón a estas materias que son relevantes en la vida modernas”, sostuvo.

Por su parte, el alcalde de Puntiaqui, Carlos Araya Bugueño, reconoce que desde el municipio se han hecho los esfuerzos y las gestiones por mejorar la realidad de su comuna, pero que aun así falta mucho por avanzar.

“La conectividad digital es otra de las tantas desigualdades del mundo rural, y en pandemia se hizo más que visible. Algo tan básico como la telefonía celular, en muchas de nuestras localidades lamentablemente no contamos con cobertura, para qué decir del internet, herramienta más que esencial e importante para desarrollar las actividades escolares de nuestro y nuestras estudiantes. En este sentido y post pandemia, el equipo de profesionales del departamento de educación realizó innumerables gestiones con el fin de obtener acceso al internet satelital y fibra óptica para 16 establecimientos educacionales de Punitaqui, estas acciones se concretaron a través del programa Enlaces del Ministerio de Educación, es cierto que aún falta mucho por hacer, pero este es un significativo avance al respecto”, concluyó.

 

 

 

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