Por Omar Aguirre / Ovalle
Luchar contra el abandono de perros y gatos, así como el maltrato animal, y fomentar la tenencia responsable de mascotas, se ha vuelto una causa común en todo el país y genera cada vez más surgimiento de agrupaciones o fundaciones dispuestas a rescatar, denunciar y difundir estas situaciones para que no queden impunes ante la ley.
La capital de la provincia del Limarí no es la excepción y cuenta con una gran cantidad de agrupaciones que trabajan en forma voluntaria para ayudar a los animales que han sido víctimas de maltrato por parte del ser humano. Aquí deben jugar un rol fundamental los centros de tenencia responsable o veterinarias municipales.
La ley “Cholito” establece que a nivel comunal, las municipalidades están facultadas para rescatar a todo animal que no tenga identificación, encontrado en bienes nacionales de uso público, parques, plazas y sitios eriazos o baldíos, pudiendo entregarlo a una de las entidades sin fines de lucro promotora de la tenencia responsable, esterilizarlo y reubicarlo al cuidado de alguna persona u organización que asuma su tenencia responsable.
Además, les corresponderá fiscalizar el cumplimiento de la ley, es decir, todas aquellas infracciones a las normas de la tenencia responsable serán fiscalizadas por los inspectores municipales, quienes tendrán que remitir los antecedentes ante el juez de policía local.
Este reglamento parece no estar cumpliéndose del todo en Ovalle, pues, según señala Lorena Ardiles, fundadora de la agrupación animalista “Tuti Patitas” de la comuna, “desde el año pasado hemos estado solicitando horas de esterilización a la veterinaria municipal pero nunca nos otorgaron. En un principio se nos señaló que esto se debía a que no teníamos personalidad jurídica, la cual posteriormente obtuvimos y, ni así, se nos otorgaron horas para atender a nuestros rescatados. Mayor fue nuestra sorpresa cuando, durante este año, se elaboró el calendario vacunaciones y esterilizaciones donde ni siquiera se nos consideró, pero si a personas naturales y a otras fundaciones y agrupaciones de la comuna”.
Ardiles agrega que “existe una mala disposición por parte del encargado del centro de rescate. Son muchos los perritos y gatitos rescatados y no contamos con el apoyo por parte de la municipalidad como si otras agrupaciones. No nos contestan el teléfono, no nos dan horas y no hemos tenido ningún tipo de respuesta por parte del municipio. Hasta el momento las esterilizaciones han tenido que correr por nuestra propia cuenta, organizando rifas y colectas con personas que si respetan a los animales”.
La fundadora de la agrupación señala que la semana pasada tuvieron una reunión con el equipo municipal, “donde el encargado negó sus dichos y no se respondió a sus exigencias. Además, enviamos una carta al concejo municipal con todo lo que estaba pasando y tampoco hemos tenido respuesta”.
