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Desde la comunidad indígena Kaikama Tatul Guayaquil lamentan que rocas sean rayadas o destrozadas por visitantes inescrupulosos, y más cuando en muchos casos existen petroglifos de sus ancestros. En este contexto, hacen un llamado a las autoridades a proteger estos sitios, así como a la población a cuidar el entorno.

 

Tristeza, indignación y preocupación generan los rayados y destrozos a rocas en cerros de la comuna de Monte Patria, y así lo ha registrado el comunero diaguita Alexis Escobar Muñoz, quien es presidente de la comunidad indígena Kaikama Tatul Guayaquil.

“Hemos visto varios sitios vandalizados, especialmente en los cerros más conocidos, como el cerro Guayaquil o el cerro Huatulame, que está camino a Combarbalá. Este es un problema que tenemos hace rato, desde el año 97 en adelante que hemos visto que aparecen estos rayones”, comenzó declarando.

Esta preocupación se acrecienta cuando muchas de las rocas vandalizadas cuentan con petroglifos de los ancestros, “en el cerro Huatulame, a la orilla de la carretera y al lado del cementerio, hay un montón de petroglifos que ni siquiera tienen un letrero, están picados y rayados”, sostuvo.

 

VALOR ESPIRITUAL

 

En este sentido, Alexis Escobar Muñoz comenta la especial importancia que tienen estos cerros para la comunidad diaguita de la zona, ya que son lugares considerados sagrados.

“Justamente ahora, en el calendario andino, estamos celebrando el mes de la Pachamama, que es la madre tierra. Entonces nosotros vamos a ofrendar a estos lugares sagrados, a los que se les llama Guaca. Ahí es donde nosotros destacamos la importancia de los cerros, de hecho, la definición de la misma nomenclatura diaguita viene de los cerros, entonces para nosotros es especialmente importante destacarlos, porque han sido nuestro refugio por generaciones. Acá en Monte Patria tenemos cerros con gran riqueza arqueológica, como el propio cerro Guayaquil”, apuntó.

 

FALTA DE PROTECCIÓN

 

El dirigente indígena comenta que estos hechos se ven favorecidos ante la nula protección que tienen estos cerros, y en ese sentido, espera que las autoridades puedan tomar cartas en el asunto.

“En general, en la cuarta región el patrimonio no está protegido, si eso lo llevamos a la provincia del Limarí es mucho peor, porque son muy pocas las zonas declaradas oficialmente como monumento histórico. Entonces eso indica que no hay lugares protegidos, al menos en las comunas de Monte Patria, Punitaqui y Combarbalá”, indicó.

De esta forma, hace un llamado a la población en general, para que cuiden estos entornos al visitarlos, “especialmente en este mes de la Pachamama, es fundamental entender los roles que juegan los elementos de la naturaleza en la identidad de las personas, porque estos cerros han sido refugio en diferentes épocas históricas, no solamente en la llegada del inca y del español, sino también con la llegada de las diferentes dictaduras, entonces estos cerros han sido muy importantes a lo largo de la historia, pero ahora están ahí infravalorados. El llamado es a reconocer la importancia de la naturaleza y de las generaciones que viven y se han mantenido aquí por generaciones”, concluyó.

 

PROYECTO DE RESCATE

 

Desde la Delegación Presidencial del Limarí se han interiorizada en esta problemática, y desde ahí se han gestionado soluciones para algunos de los sitios en peligro.

“Los petroglifos son un patrimonio arqueológico y cultural de gran importancia para el pueblo diaguita y la identidad de nuestros valles, urge avanzar con la protección de los mismos y urge llamar a la comunidad a su protección y cuidado. En el Sector de Piedras Bonitas, un lugar de gran riqueza patrimonial se desarrollará un proyecto de rescate y revitalización importante de un oratorio ancestral por parte de la comunidad y el servicio de patrimonio que contempla una inversión aproximada de 80 millones”, informó el delegado presidencial limarino, Galo Luna Penna.

 

 

 

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