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El Ovallino
Los ambulantes provenientes de otras comunas del país empañaron la Fiesta Grande del Niño Dios de Sotaquí, generando molestia en los peregrinos y vecinos de la localidad. Las autoridades analizan lo sucedido este fin de semana, para coordinar mayores medidas de seguridad en las actividades que se realicen a futuro.

 

La celebración por los 150 años de la fiesta del Niño Dios de Sotaquí no fueron lo esperado, y así fue manifestado por devotos y vecinos de la localidad ovallina, quienes se vieron afectados por la masiva llegada de comerciantes informales, quienes provenían de otras regiones del país, y sin ningún tipo de respeto se instalaron en lugares no habilitados para el comercio.

Así fue destacado por la presidenta de la junta de vecinos de Sotaquí, Raquel Araya, quien lamentó la agresividad de estos invasores, “los comerciantes no respetaron la calle donde pasa la procesión, colocaron sus carpas y en otro sector sus vehículos, no hubo ningún respeto. Además de habían peleas, mucho trago, son agresivos, y todo eso se escapa de las manos de las autoridades, y los dirigentes menos podemos hacer algo. Estas personas se colocaban en las entradas de las casas, no le dejaban salida a los vecinos, los mismos comerciantes que son del pueblo se vieron afectados, porque también les taparon las pasadas”, indicó.

En este sentido, la dirigenta vecinal cree que se tendrán que tomar medidas más drásticas para evitar estos problemas, “en la fiesta chica no creo que pase tanto, porque al ser más chica no es mucho el comercio, pero para la fiesta grande será difícil, con todo esto que pasó yo creo que quizás las autoridades no van a autorizar el comercio, hay cosas que sobrepasan. Hay que decir que sí se hicieron coordinaciones, pero llega el momento y eso no se respeta. El municipio, carabineros y la delegación planificó, pero se escapa de las manos”, sostuvo.

“El pueblo está quedando chico, porque la fiesta ha crecido mucho”, enfatizó.

 

EVALUACIÓN DE LA EXPERIENCIA

 

Autoridades manifiestan estar al tanto de esta situación, y en ese contexto aseguran que se tomarán medidas para próximas ocasiones.

Así fue manifestado en primer lugar por la Delegada Presidencial del Limarí, Marily Escobar, “destacamos la acción de carabineros que permitió realizar más de 700 controles y cursar más de 80 infracciones por distintas situaciones irregulares. Así también quisiera destacar a nuestro equipo de la Delegación Presidencial, Seremi de Salud, SII y municipio, quienes estuvieron en terreno los días de la fiesta procurando que se desarrolle con normalidad. Por supuesto que hay muchos aprendizajes que hemos obtenido de la experiencia de esta fiesta. Hemos recogido las sugerencias, observaciones y demandas que han tenido especialmente los vecinos de la localidad y  en base a ello poder coordinar acciones para el próximo año. La idea siempre es mejorar este tipo de actividades y evitar que por algunos sujetos que se comportan fuera de la norma se empañe de cierta manera una actividad tan significativa y tradicional como esta”, señaló la máxima autoridad provincial.

Palabras similares tuvo el alcalde de Ovalle, Jonathan Acuña, “en primer lugar señalar que estuvimos trabajando en la fiesta de Sotaquí, durante bastantes meses. Indicar que si bien hacemos un balance positivo, no estuvo exento de dificultades, que van de la mano con el excesivo comercio informal proveniente de otras comunas del país, junto con ello, logramos sortear con Carabineros varias de estas dificultades, realizando todo el peregrinaje y las actividades de tipo eclesiástica de manera normal, pero esto nos va servir para generar una planificación aún más exhaustiva, y no descartar decisiones futuras que podamos desarrollar como municipalidad”, apuntó.

En este sentido, el jefe comunal ovallino no descarta la posibilidad de una fiesta religiosa sin presencia de comercio, “lógicamente que es una opción que se debe analizar. En conversaciones con las personas de la parroquia de Sotaquí, nos manifestaron que en periodo de pandemia se realizó esta fiesta sin comercio, entendiendo la situación sanitaria, y la realizaron de una muy buena forma, por lo tanto, es una posibilidad que nosotros no descartemos, aunque independiente de eso, tenemos que seguir buscando estrategias para mejorar en la seguridad, tenemos que considerar todos los factores que acá inciden, y debemos mantener el contacto con todas las organizaciones de tipo territorial y eclesiástica de la localidad”, concluyó.

 

 

 

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