Foto: Rodolfo Pizarro
La dura derrota del Club Social y Deportivo Ovalle en la primera fecha de la postemporada caló hondo en plantel. Y es que ni el más pesimista de los seguidores se esperaba que el equipo de Juan Carlos Ahumada perdiera por 0.-3 en condición de locatario.
En un primer tiempo friccionado y con pocas llegadas en ambos arcos, fue en el complemento donde la visita desnudó los yerros del equipo, tanto en generación de ocasiones de gol como en jugadas de táctica fija.
Fue justamente este expediente el que más dolió, ya que el segundo y tercer gol llegaron mediante tiros libres directos, que los santiaguinos aprovecharon para llevarse el partido y los tres puntos.
“Fue un gran equipo, nada que decir. Es el primer partido, nos duele la derrota, pero hay que seguir trabajando. Nos costó generar ocasiones de gol, sus laterales pasaban mucho al ataque y eso nos complicó. Ahora hay que conseguir los puntos en Curacaví y trabajaremos esta semana para poder lograrlo”, sostuvo Nicolás Orrego, delantero de los ovallinos.
“En el primer tiempo estuvo muy apretado, donde los dos equipos corrieron demasiado. Quizás hubo un poco de desorden para generar ocasiones de gol, pero esto son cosas del partido y debemos trabajar para solucionar estos errores”, dijo Iván Lobos, delantero que ingresó en el complemento.
En el Estadio Municipal de Monte Patria volvieron los fantasmas de los balones detenidos y táctica fija, aquel aspecto que durante el comienzo del campeonato eran evidentes. Junto con esto, la ansiedad de los jugadores y las pocas ocasiones de gol generadas decantaron en el 0-3.
“Vi a algunos jugadores nerviosos, ansiosos, y eso quizás no pudimos manejarlo. Esto se dio hoy, sobre todo en el segundo tiempo. No tuvimos un buen control del balón, si bien peleamos todos los mano a mano, no estuvimos atinados. No es que no quisiéramos generar llegadas, y las que nos creamos estuvimos demasiado ansiosos. Oportunidades hubo, pocas pero hubo”, comentó el técnico Ahumada.
