El alto valor del peaje de la ruta que une Ovalle con La Serena y Coquimbo ha despertado profunda molestia entre la comunidad limarina. (FOTO: LAUTARO CARMONA)
Fuerte molestia ha generado en la comunidad ovallina y en el resto de la provincia, el anuncio de la tarifa que tendrá el peaje en la ruta que une a Ovalle con La Serena y Coquimbo.
Dicha información se entregó a través de un documento emitido por el área de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas, donde se dieron a conocer de manera oficial los costos que cancelarán los automovilistas por el uso de la vía a partir del próximo 8 de julio.
De esta forma, y de acuerdo a la información entregada, las motos y motonetas cancelarán 850 pesos, autos y camionetas con y sin remolque 2.900 pesos, buses de dos ejes 5.250 pesos, camiones de dos ejes, camionetas doble rueda trasera, maquinaria agrícola y maquinaria de construcción 5.250 pesos, buses de más de dos ejes 5.250 pesos, y camiones de más de dos ejes 9.350 pesos. Valores todos ellos fueron fuertemente rechazados por la comunidad y las autoridades de las comunas involucradas.
Así, durante las últimas horas la noticia ha remecido a la provincia del Limarí, lo que ha generado diversas reacciones de parte de autoridades, expertos y de la misma ciudadanía, criticando el alto valor del peaje.
En primera instancia, la reacción vino de los alcaldes, como los ediles de Ovalle, Claudio Rentería, y de Río Hurtado, Gary Valenzuela, quienes ser reunieron, y exigieron a las autoridades revisar el valor del cobro del peaje, además de solicitar al ejecutivo una disminución de precios considerando que la doble vía no se encuentra en un 100% terminada.
SUBSIDIO QUE NO FUE
Los alcaldes limarinos aseguran que al menos, desde el año 2014, sostuvieron reuniones con el entonces Ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, quien se habría comprometido a evaluar la posibilidad de aumentar el subsidio estatal para la doble vía, lo que rebajaría el costo del peaje que señalan, se estimaba en los 2 mil pesos.
“Vamos a hacer los oficios a las autoridades correspondientes, para manifestar nuestra inquietud, reclamar por las cosas que se nos señaló anteriormente y que no se cumplieron, como el hecho de que el peaje no tendría un costo mayor a los 2 mil pesos. Además, creo que no es posible que se inicie el cobro a partir del 8 de julio, cuando la doble vía no está 100% terminada y aún existen tramos peligrosos, por eso queremos que se analice la situación de aplazar y a la vez rebajar el cobro” indicó el alcalde Claudio Rentería.
Por su parte, el alcalde de Río Hurtado, Gary Valenzuela mostró su preocupación, porque estos cobros “van a involucrar un gasto desmedido si tomamos en cuenta la realidad de la provincia del Limarí y de las familias de Río Hurtado particularmente. Sin duda, será un adelanto y un camino expedito, pero eso no significa que nos impongan costos tan altos, porque serán, prácticamente, 6 mil pesos los que deberán cancelar las familias que tengan que dirigirse a la capital regional”.
Respecto al subsidio estatal, el diputado Matías Walker reconoció que no implementarlo fue un error, pero que dicho error “fue compartido entre el primer gobierno del presidente Piñera y el segundo gobierno de la Presidenta Bachelet”, rechazando lo dicho por el seremi de Obras Públicas, Pablo Herman, y el gobernador del Limarí, Darío Molina, quienes responsabilizaron al gobierno anterior por las tarifas del peaje.
Pero más allá de las “culpas” si hay algo en que coinciden todos, es en el valor excesivo del cobro, situación que encarecería el viaje.
PEAJE SOBREVALORADO
Los altos precios que publicó la Concesionaria incluso son cuestionados por expertos en el tema, como Iván Jacob, ingeniero en construcción, quien aseguró que este peaje “nunca debiera haber costado más de 2 mil pesos, como mucho”.
Como ejemplo, pone como comparación lo que cobra la misma concesionaria de la ruta D-43 – Sacyr – por la operación que esta misma empresa tiene de la ruta 5, entre Coquimbo y Los Vilos, “donde hay dos peajes, es una ruta de otro estándar, con más obras que son más caras. Claramente el peaje está sobrevalorado en al menos un 50%, si no me quedo corto”.
Por su parte, el también ingeniero, Cristian Loyola fue enfático en asegurar que el peaje “no cuesta eso, sino que la pasada por la ruta debería estar entre los 700 u 800 pesos, pues son apenas 80 kilómetros. No es una ruta para cobrar esos montos”.
Al igual que Jacob, este ingeniero compara la tarifa anunciada por la empresa con la que se cobra en la ruta 5: 2.700 pesos. “Está muy por encima de lo normal el precio. Además la obra aún no está terminada para poder empezar a cobrar el peaje” aseguró.
En ese sentido, ambos profesionales señalan que estas condiciones se establecen en los contratos que el Estado firma con las empresas privadas.
Al respecto, el diputado Matías Walker asegura que “desde el año 2012 vengo advirtiendo respecto del erróneo modelo de esta licitación” indicando que durante la primera administración piñerista, se reunió con los ministros de Obras Públicas de la época, para plantear que “requeriríamos un subsidio mayor, porque ya se hablaba de un peaje proyectado de 2.400 pesos, lo que ya era desproporcionado”.
El legislador aseguró que se diseñó una licitación “en términos tales en que, el que presentaba la oferta por el menor requerimiento del subsidio estatal era la empresa que se adjudicaba el contrato, y así fue, y no porque finalmente cobrara un valor de peaje menor”.
Durante el segundo gobierno de Bachelet, Walker señaló que hubo obras “que lamentablemente no se consideraron en el diseño y en la licitación, como las que exigieron las comunidades de Pejerreyes, Recoleta, o Lagunillas, y se tuvieron que incorporar en ese gobierno, sin que se establecieran subsidios de parte del Estado para poder financiar esas obras. Y eso fue un error”.
Desde el ámbito profesional en tanto, se critica que además, no se haya contado con la debida participación ciudadana, la cual sólo estuvo reducida al tema de las obras.
“Entiendo que la comunidad fue ajena a eso, no creo que se hayan mostrado los costos a la comunidad. Prácticamente, a partir de hechos consumados se conoce el valor. Además, aquí se habló de todos los temas, pero nunca se habló del costo de la ruta” sentencia Iván Jacob.
¿SOLUCIONES?
Ambos ingenieros coinciden en que a partir de ahora, la opción de negociar las tarifas con la empresa concesionaria se hace difícil, “pero debieran reconsiderar esos valores de todos modos, porque esto afecta a muchísima gente. Pero no sé si lo podrán hacer” afirma Jacob.
En tanto, Cristian Loyola coincide en que una eventual negociación entre Estado y el privado se hace complicado “por los contratos mal hechos”, aunque no descarta que la propia empresa busque a la larga, una forma de negociar, si es que el Estado propusiera por ejemplo, un camino alternativo para evitar el paso por la cuesta Las Cardas.
“Cuando se hizo el túnel El Melón, la concesionaria empezó a subir los peajes hasta más de 5 mil pesos por auto. Pero eso fue por un contrato mal hecho del Estado con la empresa privada. Entonces, desde el gobierno dijeron ‘bien, no podemos bajar esa tarifa porque tenemos un contrato con ustedes, por lo que nosotros vamos a licitar otro túnel al lado’. Ante eso, la concesionaria bajó la tarifa e hicieron un contrato nuevo” explica el ingeniero Cristian Loyola.
Para el diputado Matías Walker en tanto, la única solución viable para bajar los precios es “aplicar un subsidio estatal mayor, lo que no se consideró en los últimos dos gobiernos anteriores. Algunos hablan de la posibilidad de ampliar el contrato de concesión, pero me dicen que eso tendría un efecto muy menor, porque la verdad es que recién se está iniciando la operación. Entonces no tendría un efecto muy considerable sobre la rebaja que queremos producir” afirma el legislador.
“El ejecutivo tiene la solución. En vez de someternos a un debate sobre cuál el gobierno tuvo la culpa – porque por lo menos, yo tengo claro que los dos gobiernos anteriores tuvieron responsabilidad en esto – unámonos para trabajar y dar una solución en conjunto” concluyó Walker.
La ciudadanía se moviliza
En tanto, mientras avanza el debate sobre las posibles soluciones para bajar el valor del peaje de la ruta D-43, ciudadanos, gremios y organizaciones sociales comienzan a moverse para hacer sentir su voz.
Rodrigo Gálvez, vocero del movimiento Cambiemos el Peaje, señalan que existe voluntad para llevar a cabo una movilización cuya fecha tentativa sería hasta ahora, para el próximo 6 de julio.
“Nos parece bien que algunos diputados hayan levantado la voz, pues esta semana nosotros nos juntamos con varios de ellos para plantearles nuestras demandas. Nosotros queremos pagar un peaje, pero sea un valor justo, que no exceda los 1.000 o 1.100 pesos para los vehículos menores y que, por otro lado, las líneas de buses también sean beneficiadas con una rebaja. Para ello solicitamos que la ruta sea subsidiada” señala. “Este beneficio que se estaba planteado, dejó de serlo totalmente con estos valores” sentenció.
Por su parte, otra agrupación ciudadana también ha invitado a organizarse para mostrar la molestia de los ovallinos. De hecho, convocaron para hoy, a las 19:30 horas un encuentro ciudadano en el auditórium municipal para discutir sobre el tema.
José Cortes, uno de los voceros del movimiento, señaló que “la idea es convocar a toda la ciudadanía, a los gremios de la locomoción colectiva para que manifiesten también sus puntos de vista, porque creo que esto nos afecta a todos como ciudad y como provincia. El objetivo no es eliminar el peaje, sino disminuir su costo, que es demasiado excesivo, sobre todo para una ruta que aún no está terminada” asegura.
