Luego de estar dos años alejados de la acción social debido a los embates de la pandemia, este verano Techo Chile retornó a sus actividades y lo hizo en la comuna de Monte Patria. La iniciativa que cumple 25 años de existencia convocó a más de 70 voluntarios que están repartidos por distintos puntos de la comuna, trayendo la esperanza a decenas de familias vulnerables.
La organización planea construir 20 viviendas sociales en la comuna con el fin de dar solución a las necesidades habitacionales de los grupos más desposeídos.
La directora regional de Techo Coquimbo, Paula Fuentes, destacó la labor que realizan los jóvenes que se unen como voluntarios en los trabajos de verano y se refirió a la iniciativa como una oportunidad para la zona. “¿Qué mejor que poder volver a la comuna de Monte Patria? Hace un par de años hicimos unos trabajos más pequeños donde tuvimos una excelente experiencia y lo más importante es que podamos llegar a territorios donde muchas veces no podemos llegar”.
A nivel regional, la comuna de Monte Patria es una de las zonas mayormente beneficiadas con esta obra, la cual, sin la ayuda de la gestión de su alcalde, Cristian Herrera, no podría haberse concretado, trayendo así una solución provisoria a las familias montepatrinas.
“Creemos que el trabajo colaborativo da buenos frutos y quién sale beneficiado de estos trabajos siempre es la comunidad. Le damos las gracias a Techo que haya elegido a Monte Patria para construir 20 viviendas que, sin duda, será una mejora en distintos sectores de nuestra comuna”, indicó la primera autoridad comunal.
Según los datos recopilados por Techo-Chile, se estima que actualmente son 500 mil las personas que no tienen una vivienda digna. Es por ello que los voluntarios de Techo provenientes de las regiones de Atacama y Coquimbo estarán desplegados por sectores como Laguna Verde, El Palqui, Huana, Chilecito, El Maitén y Tulahuén entre otros hasta el 3 de febrero.
La jefa de cuadrilla de voluntarios, Carolina Orobari, indicó que “ha sido una jornada calurosa, pero hemos estado trabajando bien, con los tiempos que tenemos previstos para tener listas las casas. Habíamos trabajado en campamentos, pero hacerlo aquí en sectores rurales, ha sido una experiencia distinta”.
La idea de Techo es poder llegar a los rincones más alejados de la comuna y trabajar con las comunidades en la mejora de condiciones de vivienda y hábitat, a través del diseño, gestión y construcción de proyectos de vivienda, acceso a servicios básicos e infraestructura comunitaria, en acción conjunta entre pobladores y voluntarios.
Ante esta ayuda, los beneficiarios de las nuevas viviendas expresaron su emoción. Herman Cortés, habitante de Chilecito, es uno de ellos quien ha visto como poco a poco va tomando forma el trabajo de estos jóvenes quien dijo estar “feliz por haber obtenido este beneficio, que también ayudará a muchas familias”.
